Parece que les a gustado la cancioncilla esa que dice...
Los obuses ATP de dos en dos ua ua
Cali Carrozas: Angelito, in memoriam...
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Carlos
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Marchando.TELVM escribió:Doc, me interesa rastrear la historia de esta foto:
¿De donde la has sacado?
This next photo was taken as the prototype Vulcan made a low pass over the Runway at the 1958 Syerston Battle of Britain display. It was being used by Rolls Royce as a test bed for the Conway engine (Victor/VC-10 and Boeing 707 engine). Despite4 appearances the catastrophe was nothing to do with the engine, but a structural failure of the wing!
http://www.abovetopsecret.com/forum/thread186611/pg1
Calibra 2.0i 115cv C20NE año 92 recycled
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Carlos
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Hecha un ojo a esta pagina que es muy buena.
http://www.micom.net/oops/
Tambien hay algun video que quita el hipo.
http://www.micom.net/oops/MD80_Hard_Landing.mpeg
http://www.micom.net/oops/
Tambien hay algun video que quita el hipo.
http://www.micom.net/oops/MD80_Hard_Landing.mpeg
Calibra 2.0i 115cv C20NE año 92 recycled
Victorias por mar de los Españoles. (Nuevo Libro)
Carmelo López- Arias
El derrotismo con el que parte de la opinión, incluso académica, contempla nuestra historia naval no se corresponde con la realidad de los hechos, ni siquiera en los siglos XVII a XIX.
En la mayor parte de los países, la labor de los historiadores objetivos es "bajar los humos" del patriotismo autóctono, que tiende a exaltar las hazañas propias, reales o ficticias, con demérito de la verdad de los hechos. (Intenten convencer a un francés de que Francisco I cayó prisionero en la batalla de Pavía, en 1525, y fue prisionero de Carlos I en Madrid durante una buena temporada.)
Pero en España, aquejada del mal que alguien ha denominado nacional masoquismo, es justo al revés: es preciso recurrir a algunos historiadores -no a todos, porque los hay que actúan como virus de esa enfermedad- para que nos levanten la moral. Se nos olvida con demasiada frecuencia que el papel hegemónico que Estados Unidos no lleva ni un siglo ejerciendo en el mundo, sólo ha tenido tres precedentes comparables desde la historia antigua: España, Francia e Inglaterra. Nos cuesta creer que un día se creó una leyenda negra en torno a Felipe II por las mismas razones por las que hoy se crea en torno a George Bush: porque el rey de España era la referencia política del orbe, focalizador de todos los odios y resentimientos.
La Armada, orgullo nacional
Uno de esos historiadores es Agustín Ramón Rodríguez González, profesor universitario y gran especialista en historia naval. Ya nos deleitó hace no mucho con una excepcional historia de "la más grande ocasión que vieron los siglos" (Miguel de Cervantes dixit): Lepanto. La batalla que salvó a Europa. Y ahora, en la misma editorial, Grafite Ediciones, ofrece al lector una apasionante visión sobre las Victorias por mar de los españoles.
Lo introduce Mariano Juan y Ferragut, capitán de navío y director de la Revista General de Marina (donde nuestro autor, con sus notas históricas, se ha convertido en una de las firmas de referencia). Dice el prologuista que estas páginas "estimulará[n] nuestro mejor patriotismo y el orgullo de sentirnos españoles, pues pocos pueblos pueden presentar una ejecutoria marítima y naval como la nuestra, por más que muchas veces lo olvidemos".
Y es que ése es el problema: que lo olvidamos. O, simplemente, lo desconocemos, porque nadie nos lo cuenta. Como señala Rodríguez González, hasta la victoria de Lepanto nos quieren arrebatar: dado que es insoslayable que los turcos perdieron la batalla y -¡qué se le va a hacer!- su derrota frenó para dos siglos las aspiraciones del islam de conquistar Europa, ahora intentan convencernos de que todo el mérito corresponde a la participación veneciana.
Por eso el autor desempolva otras muchas victorias que las armas españolas lograron entre los siglos XVI y XIX, incluso en época de supuesta "decadencia". Para sorpresa del lector, descubriremos que España no dejó nunca de ser una potencia marítima, logrando triunfos muy importantes que, hasta la invasión napoleónica -cuando comienza la verdadera cuesta abajo de nuestro país- nos mantuvieron entre las Cortes "que contaban" de verdad en el mundo.
Hechos de armas sin par
España tuvo que enfrentarse a un número muy variado de enemigos, en escenarios múltiples y, respecto a sus grandes competidoras, las Armadas francesa y británica, siempre con inferioridad de medios, salvo en tiempos de Felipe II. Lo cual demuestra la destreza de nuestros marinos y nuestro arte de la guerra: durante los siglos XVI y XVII, "las tácticas españolas habían mostrado y seguirían mostrando su franca superioridad contra cualquier clase de enemigos", dice Rodríguez González. No es sólo el clásico "valor" de nuestras Armas -que también-, sino "la pericia marinera, las innovaciones técnicas y tácticas y la decisión y la tenacidad" de que siempre hicieron gala.
Algunos de los hechos, desconocidos para el gran público, que aborda nuestro autor son:
- la batalla de las Terceras o de San Miguel, en 1582, contra la Armada francesa, cuando Don Álvaro de Bazán salvó el trono de Felipe II en Portugal y conjuró el peligro galo por mar durante medio siglo;
- las invasiones españolas sobre suelo británico para apoyar las insurrecciones irlandesas, incluido el desembarco de 1597 en suelo inglés, en Falmouth, de cuatrocientos hombres, que pudieron ser 12.500, no mediando una terrible tormenta;
- la derrota de la flota de Francis Drake en 1589 en su intento por invadir la Península, de similar magnitud a la derrota de la Invencible española un año antes, pero que la historia, escrita a anglófilo modo, silencia pudorosamente;
- la desigual victoria en 1621, con nueve buques contra treinta y uno, del almirante Don Fadrique de Toledo para salvar el estrecho de Gibraltar del ataque holandés;
-la permanente defensa, siempre victoriosa, de las costas catalanas contra los ataques franceses durante toda una década a mediados del siglo XVII;
- la apasionante gesta del navío Glorioso en 1747, al mando de Don Pedro Mesía de la Cerda, que transportaba cuatro millones de pesos de plata desde La Habana hasta España y superó tres combates, él solo contra toda una escuadra inglesa, hasta que lograron hundirlo, pero cuando ya había desembarcado su tesoro en Corcubión: misión cumplida;
-la lucha contra los barcos argelinos durante todo el siglo XVIII;
-e incluso, ya en los últimos años de reinado de Isabel II (cuando se modernizó la escuadra con buques de vapor, hasta situarla de nuevo entre las mejores del mundo, aunque ya lejos de la francesa y la británica), las campañas del archipiélago de Chiloé contra la Armada chilena.
Y todas ellas, entre otras muchas. Una historia, pues, de honor militar y pericia naval, con victorias importantes que no merecen caer en el olvido. Las hazañas de nuestros marinos alimentan, no menos que las de los Tercios de Flandes, el legítimo orgullo de lo que hemos sido.
Más: http://www.fragata-librosnauticos.com/novedades.php
Un Saludo.
Carmelo López- Arias
El derrotismo con el que parte de la opinión, incluso académica, contempla nuestra historia naval no se corresponde con la realidad de los hechos, ni siquiera en los siglos XVII a XIX.
En la mayor parte de los países, la labor de los historiadores objetivos es "bajar los humos" del patriotismo autóctono, que tiende a exaltar las hazañas propias, reales o ficticias, con demérito de la verdad de los hechos. (Intenten convencer a un francés de que Francisco I cayó prisionero en la batalla de Pavía, en 1525, y fue prisionero de Carlos I en Madrid durante una buena temporada.)
Pero en España, aquejada del mal que alguien ha denominado nacional masoquismo, es justo al revés: es preciso recurrir a algunos historiadores -no a todos, porque los hay que actúan como virus de esa enfermedad- para que nos levanten la moral. Se nos olvida con demasiada frecuencia que el papel hegemónico que Estados Unidos no lleva ni un siglo ejerciendo en el mundo, sólo ha tenido tres precedentes comparables desde la historia antigua: España, Francia e Inglaterra. Nos cuesta creer que un día se creó una leyenda negra en torno a Felipe II por las mismas razones por las que hoy se crea en torno a George Bush: porque el rey de España era la referencia política del orbe, focalizador de todos los odios y resentimientos.
La Armada, orgullo nacional
Uno de esos historiadores es Agustín Ramón Rodríguez González, profesor universitario y gran especialista en historia naval. Ya nos deleitó hace no mucho con una excepcional historia de "la más grande ocasión que vieron los siglos" (Miguel de Cervantes dixit): Lepanto. La batalla que salvó a Europa. Y ahora, en la misma editorial, Grafite Ediciones, ofrece al lector una apasionante visión sobre las Victorias por mar de los españoles.
Lo introduce Mariano Juan y Ferragut, capitán de navío y director de la Revista General de Marina (donde nuestro autor, con sus notas históricas, se ha convertido en una de las firmas de referencia). Dice el prologuista que estas páginas "estimulará[n] nuestro mejor patriotismo y el orgullo de sentirnos españoles, pues pocos pueblos pueden presentar una ejecutoria marítima y naval como la nuestra, por más que muchas veces lo olvidemos".
Y es que ése es el problema: que lo olvidamos. O, simplemente, lo desconocemos, porque nadie nos lo cuenta. Como señala Rodríguez González, hasta la victoria de Lepanto nos quieren arrebatar: dado que es insoslayable que los turcos perdieron la batalla y -¡qué se le va a hacer!- su derrota frenó para dos siglos las aspiraciones del islam de conquistar Europa, ahora intentan convencernos de que todo el mérito corresponde a la participación veneciana.
Por eso el autor desempolva otras muchas victorias que las armas españolas lograron entre los siglos XVI y XIX, incluso en época de supuesta "decadencia". Para sorpresa del lector, descubriremos que España no dejó nunca de ser una potencia marítima, logrando triunfos muy importantes que, hasta la invasión napoleónica -cuando comienza la verdadera cuesta abajo de nuestro país- nos mantuvieron entre las Cortes "que contaban" de verdad en el mundo.
Hechos de armas sin par
España tuvo que enfrentarse a un número muy variado de enemigos, en escenarios múltiples y, respecto a sus grandes competidoras, las Armadas francesa y británica, siempre con inferioridad de medios, salvo en tiempos de Felipe II. Lo cual demuestra la destreza de nuestros marinos y nuestro arte de la guerra: durante los siglos XVI y XVII, "las tácticas españolas habían mostrado y seguirían mostrando su franca superioridad contra cualquier clase de enemigos", dice Rodríguez González. No es sólo el clásico "valor" de nuestras Armas -que también-, sino "la pericia marinera, las innovaciones técnicas y tácticas y la decisión y la tenacidad" de que siempre hicieron gala.
Algunos de los hechos, desconocidos para el gran público, que aborda nuestro autor son:
- la batalla de las Terceras o de San Miguel, en 1582, contra la Armada francesa, cuando Don Álvaro de Bazán salvó el trono de Felipe II en Portugal y conjuró el peligro galo por mar durante medio siglo;
- las invasiones españolas sobre suelo británico para apoyar las insurrecciones irlandesas, incluido el desembarco de 1597 en suelo inglés, en Falmouth, de cuatrocientos hombres, que pudieron ser 12.500, no mediando una terrible tormenta;
- la derrota de la flota de Francis Drake en 1589 en su intento por invadir la Península, de similar magnitud a la derrota de la Invencible española un año antes, pero que la historia, escrita a anglófilo modo, silencia pudorosamente;
- la desigual victoria en 1621, con nueve buques contra treinta y uno, del almirante Don Fadrique de Toledo para salvar el estrecho de Gibraltar del ataque holandés;
-la permanente defensa, siempre victoriosa, de las costas catalanas contra los ataques franceses durante toda una década a mediados del siglo XVII;
- la apasionante gesta del navío Glorioso en 1747, al mando de Don Pedro Mesía de la Cerda, que transportaba cuatro millones de pesos de plata desde La Habana hasta España y superó tres combates, él solo contra toda una escuadra inglesa, hasta que lograron hundirlo, pero cuando ya había desembarcado su tesoro en Corcubión: misión cumplida;
-la lucha contra los barcos argelinos durante todo el siglo XVIII;
-e incluso, ya en los últimos años de reinado de Isabel II (cuando se modernizó la escuadra con buques de vapor, hasta situarla de nuevo entre las mejores del mundo, aunque ya lejos de la francesa y la británica), las campañas del archipiélago de Chiloé contra la Armada chilena.
Y todas ellas, entre otras muchas. Una historia, pues, de honor militar y pericia naval, con victorias importantes que no merecen caer en el olvido. Las hazañas de nuestros marinos alimentan, no menos que las de los Tercios de Flandes, el legítimo orgullo de lo que hemos sido.
Más: http://www.fragata-librosnauticos.com/novedades.php
Un Saludo.
Calibra 2.0i 16V Negro (En recuperación en el dique seco, fase final)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
Portada de un Comic:
Una página del mismo:
Un saludo.
Una página del mismo:
Un saludo.
Calibra 2.0i 16V Negro (En recuperación en el dique seco, fase final)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
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TELVM
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Otra batallita marinera poco conocida que sorprenderá a más de un maño.
Durante el siglo XIII las escuadras de galeras de la corona de Aragón fueron los putos amos del Mar Mediterráneo. Al mando de almirantes como Roger de Lauria, se hartaron de ahostiar con una sola mano a las flotas francesa, napolitana y genovesa
.
Durante el siglo XIII las escuadras de galeras de la corona de Aragón fueron los putos amos del Mar Mediterráneo. Al mando de almirantes como Roger de Lauria, se hartaron de ahostiar con una sola mano a las flotas francesa, napolitana y genovesa
.
"The only true law is that which leads to freedom"
(Jonathan Livingston Seagull)
TELVM escribió:Otra batallita marinera poco conocida que sorprenderá a más de un maño.
Durante el siglo XIII las escuadras de galeras de la corona de Aragón fueron los putos amos del Mar Mediterráneo. Al mando de almirantes como Roger de Lauria, se hartaron de ahostiar con una sola mano a las flotas francesa, napolitana y genovesa
Cuando en Aragón reinaba Jaime I, el Batallador y Conquistador, junto con uno de sus Almirantes, Roger de Lauria, y con sus almogávares, consiguió tantas victorias y poder en el Mediterráneo que se decía:
"Ni galera ni otra armada alguna se atreviera a andar sobre la mar sin salvoconducto del Rey de Aragón, y no solamente ni nave ni otro bajel, pero ni los peces osaban levantar cabeza en ella sin llevar un escudo con las armas de Aragón ..."
Esto mismo lo he leído en un par de murales de decoración en Restaurantes de Zaragoza.
Buenas páginas:
http://www.aragonesasi.com/historia/cor ... /mapa4.php
http://www.fortunecity.es/imaginapoder/ ... avares.htm
Otra reseña:
" La reconquista en la península estaba prácticamente concluida, por eso Aragón se expandió por el Mediterráneo. Se comentaba en los siglos XIV y XV que "hasta los peces del Mediterráneo llevan los palos de Aragón", en referencia a los cuatro palos rojos sobre fondo amarillo que era el emblema principal del reino. Así pues, Sicilia se anexionó en 1282, Atenas en 1311, Baleares completamente en 1314, Neopatria en 1319, Cerdeña en 1322, y Nápoles en 1443. Hay que nombrar a Roger de Flor como jefe de la expedición que anexionó los Ducados de Atenas y Neopatria. Jerusalén no fue una posesión aragonesa como tal, pero en la ciudad existió una fuerte influencia tanto económica como militar".
Un Saludo.
Calibra 2.0i 16V Negro (En recuperación en el dique seco, fase final)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
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TELVM
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Angelito escribió: " ... ni los peces osaban levantar cabeza en ella sin llevar un escudo con las armas de Aragón ..."
Esto puede leerse en el plinto de una estatua de Don Álvaro de Bazán:
"El fiero turco en Lepanto,
en la Tercera el francés,
en todo el mar el inglés
tuvieron de verme espanto"
"The only true law is that which leads to freedom"
(Jonathan Livingston Seagull)
Muy bueno TELVM.
Otro buen enlace, este sobre los colores de la enseña de Aragón.
http://www.armada.mde.es/esp/CienciaCul ... t=07602_04
Un saludo.
Otro buen enlace, este sobre los colores de la enseña de Aragón.
http://www.armada.mde.es/esp/CienciaCul ... t=07602_04
Un saludo.
Calibra 2.0i 16V Negro (En recuperación en el dique seco, fase final)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
“POR LA LIBERTAD ASÍ COMO POR LA HONRA SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA” (Don Quijote a Sancho)
"La más alta ocasión que vieron los siglos pasados, los presentes, ni esperan ver los venideros" (D. Miguel de Cervantes Saavedra refiriéndose a la batalla de Lepanto, año de 1571)
una preguntilla ¿tiene el ejercito español algon vehiculo parecido al bradley americano? es que ayer me cruce con un especial que llevava encima un vehiculo militar con cañon de entre 20 y 40 mm y que me resulto muy alto no me fije si tenia ruedas o cadenas, pero recuerdo que la torreta era grande.
calibra 5 puertas edicion especial japonesa 2.0 16v twincam 
arturo perez reverte tambien pone esas citas en el siguiente escrito:
Aragón También Existe
por Arturo Pérez Reverte
Aragón también existe. A pesar de la manipulación histórica de tantos timadores y mangantes.
Que sí, hombre, que ya era hora. Que en toda esta lista de "los más vendidos", en este concurso inaudito de ignorancia, manipulación y mala fe a la hora de reinventar la Historia, uno está hasta la línea de flotación de oír siempre a los mismos, como si el resto hubiera oficiado de comparsas en la murga.
Y hete aquí por fin que alguien reacciona como es debido, y dice venga ya, y decide que ya es hora de poner en su sitio a unos cuantos timadores y mangantes, de esos que les pagan pesebres a sus historiadores de plantilla para que descosan y vuelvan a
coser la historia a medida, y luego la meten en los libros de texto y se montan unas películas que ya las hubiera querido Samuel Bronston.
Eso mientras los que saben se callan, porque son unos mierdecillas, unos "vendidos", o por el qué dirán, o porque les interesa. Y de ese modo terminamos viviendo en una España virtual, que no la conoce ni la madre que la parió.
Así que olé los huevos de Aragón, o de quien decidiera montar la exposición Aragón, Reino y Corona, que no sé si andará por alguna parte ahora, pero que durante el mes de mayo estuvo abierta en Madrid.
En toda esa mentecatez de la que hablaba antes -ahora resulta que existió un imperio catalán que hasta hace cuatro días pasó inexplicablemente inadvertido a los historiadores, o que los irreductibles vascos nunca se mezclaron en las empresas militares ni comerciales españolas- Aragón había estado mucho tiempo callado, pese a tener muchas cosas que decir, o que matizar, desde aquél
lejano siglo onceno en que Ramiro I, contemporáneo del Cid, sentaba las bases de un reino que abarcaría Aragón, Valencia, las Mallorcas, Barcelona, Sicilia, Cerdeña, Nápoles, Atenas, Neopatria, el Rosellón y la Cerdaña, y terminó formando la actual España en 1469, gracias al enlace entre su rey Fernando II de Aragón e Isabel, reina de Castilla.
Ése es el hecho cierto, y no lo cambian ni el mucho morro ni el reescribir la Historia; incluido el manejo exclusivista y fraudulento de las famosas barras que eran Senyal real no de un reino o territorio, sino de una familia o casa reinante que, como matizó Pedro IV en el siglo XIV, tiene Aragón como título y nombre principal. Casa reinante que absorbió a la casa de Barcelona, extinguida en 1150 por mutua conveniencia y deseo del titular de esta última, el conde Ramón Berenguer; que al casarse con Petronila, hija de Ramiro el Monje, rey de Aragón, adquirió como propio un linaje superior, pero renunciando al suyo, no titulándose más que princeps junto a su esposa regina; de modo que el hijo de ambos, ya con Barcelona incorporada a la corona, se tituló rey de Aragón, y nunca de Cataluña.
Por suerte no todos los archivos han caído en manos de quien yo me sé -tiemblo
al pensar qué será de ellos-, y aún quedan documentos donde comprobar lo evidente. Que, por cierto, en cuanto a la propiedad histórica de las famosas barras, no está de más recordar que en 1285 la crónica de Bernard Deslot precisaba aquello de: [u]«No pienso que galera o bajel o barco alguno intente navegar por el mar sin salvoconducto del rey de Aragón, sino que tampoco creo que pez alguno pueda surcar las aguas marinas si no lleva en su cola un escudo con la enseña del rey de Aragón".[/u]
Así que cómo me alegro, oigan, de que aquel digno y viejo Aragón olvidado, marginado, asfixiado por la perra política de este perro país, aún sea capaz de decir aquí estoy, desmintiendo a tanto oportunista y a tanto manipulador y a tanto mercachifle.
Recordando que existió una corona aragonesa que constituyó el imperio más extenso del Occidente medieval, donde, bajo su nombre y sus barras, Aragón, Cataluña y Valencia compartieron aventuras, comercio, guerras e historia, enriquecieron sangres y lenguas con el latín, el catalán y el castellano, cartografiaron el mundo, construyeron naves, pasearon mercenarios almogávares y dominaron territorios que luego aportaron a lo que ahora llamamos España, con la manifestación de los fueros y libertades propios en aquella fórmula tremenda, maravillosa y solemne: el si non, non heredado de los antiguos godos, mediante el cual los nobles aragoneses -que somos tanto como vos, y juntos más que vos-, acataban la autoridad del rey de tú a tú, reconociéndolo sólo como "el principal entre los iguales".
Por eso son buenas estas iniciativas y estas exposiciones y estas cosas. Son muy buenas, incluso higiénicas; y me sorprende que, como antídoto contra la manipulación y la desmemoria que están convirtiendo este lugar llamado España en una piltrafa y en una casa de putas insolidaria y estulta, no se les dediquen más esfuerzos, ocasiones y dinero.
Aragón También Existe
por Arturo Pérez Reverte
Aragón también existe. A pesar de la manipulación histórica de tantos timadores y mangantes.
Que sí, hombre, que ya era hora. Que en toda esta lista de "los más vendidos", en este concurso inaudito de ignorancia, manipulación y mala fe a la hora de reinventar la Historia, uno está hasta la línea de flotación de oír siempre a los mismos, como si el resto hubiera oficiado de comparsas en la murga.
Y hete aquí por fin que alguien reacciona como es debido, y dice venga ya, y decide que ya es hora de poner en su sitio a unos cuantos timadores y mangantes, de esos que les pagan pesebres a sus historiadores de plantilla para que descosan y vuelvan a
coser la historia a medida, y luego la meten en los libros de texto y se montan unas películas que ya las hubiera querido Samuel Bronston.
Eso mientras los que saben se callan, porque son unos mierdecillas, unos "vendidos", o por el qué dirán, o porque les interesa. Y de ese modo terminamos viviendo en una España virtual, que no la conoce ni la madre que la parió.
Así que olé los huevos de Aragón, o de quien decidiera montar la exposición Aragón, Reino y Corona, que no sé si andará por alguna parte ahora, pero que durante el mes de mayo estuvo abierta en Madrid.
En toda esa mentecatez de la que hablaba antes -ahora resulta que existió un imperio catalán que hasta hace cuatro días pasó inexplicablemente inadvertido a los historiadores, o que los irreductibles vascos nunca se mezclaron en las empresas militares ni comerciales españolas- Aragón había estado mucho tiempo callado, pese a tener muchas cosas que decir, o que matizar, desde aquél
lejano siglo onceno en que Ramiro I, contemporáneo del Cid, sentaba las bases de un reino que abarcaría Aragón, Valencia, las Mallorcas, Barcelona, Sicilia, Cerdeña, Nápoles, Atenas, Neopatria, el Rosellón y la Cerdaña, y terminó formando la actual España en 1469, gracias al enlace entre su rey Fernando II de Aragón e Isabel, reina de Castilla.
Ése es el hecho cierto, y no lo cambian ni el mucho morro ni el reescribir la Historia; incluido el manejo exclusivista y fraudulento de las famosas barras que eran Senyal real no de un reino o territorio, sino de una familia o casa reinante que, como matizó Pedro IV en el siglo XIV, tiene Aragón como título y nombre principal. Casa reinante que absorbió a la casa de Barcelona, extinguida en 1150 por mutua conveniencia y deseo del titular de esta última, el conde Ramón Berenguer; que al casarse con Petronila, hija de Ramiro el Monje, rey de Aragón, adquirió como propio un linaje superior, pero renunciando al suyo, no titulándose más que princeps junto a su esposa regina; de modo que el hijo de ambos, ya con Barcelona incorporada a la corona, se tituló rey de Aragón, y nunca de Cataluña.
Por suerte no todos los archivos han caído en manos de quien yo me sé -tiemblo
al pensar qué será de ellos-, y aún quedan documentos donde comprobar lo evidente. Que, por cierto, en cuanto a la propiedad histórica de las famosas barras, no está de más recordar que en 1285 la crónica de Bernard Deslot precisaba aquello de: [u]«No pienso que galera o bajel o barco alguno intente navegar por el mar sin salvoconducto del rey de Aragón, sino que tampoco creo que pez alguno pueda surcar las aguas marinas si no lleva en su cola un escudo con la enseña del rey de Aragón".[/u]
Así que cómo me alegro, oigan, de que aquel digno y viejo Aragón olvidado, marginado, asfixiado por la perra política de este perro país, aún sea capaz de decir aquí estoy, desmintiendo a tanto oportunista y a tanto manipulador y a tanto mercachifle.
Recordando que existió una corona aragonesa que constituyó el imperio más extenso del Occidente medieval, donde, bajo su nombre y sus barras, Aragón, Cataluña y Valencia compartieron aventuras, comercio, guerras e historia, enriquecieron sangres y lenguas con el latín, el catalán y el castellano, cartografiaron el mundo, construyeron naves, pasearon mercenarios almogávares y dominaron territorios que luego aportaron a lo que ahora llamamos España, con la manifestación de los fueros y libertades propios en aquella fórmula tremenda, maravillosa y solemne: el si non, non heredado de los antiguos godos, mediante el cual los nobles aragoneses -que somos tanto como vos, y juntos más que vos-, acataban la autoridad del rey de tú a tú, reconociéndolo sólo como "el principal entre los iguales".
Por eso son buenas estas iniciativas y estas exposiciones y estas cosas. Son muy buenas, incluso higiénicas; y me sorprende que, como antídoto contra la manipulación y la desmemoria que están convirtiendo este lugar llamado España en una piltrafa y en una casa de putas insolidaria y estulta, no se les dediquen más esfuerzos, ocasiones y dinero.
"if something is hard to do it's not worth doing" Homer Simpson
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Carlos
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Casi con toda seguridad seria el Pizarro.Ares escribió:una preguntilla ¿tiene el ejercito español algon vehiculo parecido al bradley americano? es que ayer me cruce con un especial que llevava encima un vehiculo militar con cañon de entre 20 y 40 mm y que me resulto muy alto no me fije si tenia ruedas o cadenas, pero recuerdo que la torreta era grande.
http://www.ejercito.mde.es/materiales/pizarro.html
Calibra 2.0i 115cv C20NE año 92 recycled
Más aviones. Fotos espectaculares de Airliners.net. Los modems me disculpen.
Un Concorde en fase de taxi.:
Un curioso Saab:
Un Mig-29 que mete miedo... Imagínate encontrarse esta estampa allá por las nubes:
La mamá parece un Boeing 767. La cría, con toda seguridad, es un CRJ regional. En SFO.
Este curioso paquidermo juraría haberlo visto expuesto en el Legends (no volaba). Sólo sé que es británico:
Este en cambio es alemán y no parece estar pasando un buen momento:
Había mucha humedad aquel día... Este chisme a medio camino entre un avión y un helicóptero, no tengo NPI de cómo se llama:
Un B-52 Stratofortress metiendo las uñas tras haber despegado.
Un Globemaster recién posado en pleno roll-out. El #3 no aguantó la reversión.
Esto es un camuflaje casi perfecto.
El giro tan animal ha provocado que la capa de aire encima del extradós se sature y la humedad se condense. Vosotros diréis qué juguetito se esconde bajo la nube. 
Un Concorde en fase de taxi.:
Un curioso Saab:
Un Mig-29 que mete miedo... Imagínate encontrarse esta estampa allá por las nubes:
La mamá parece un Boeing 767. La cría, con toda seguridad, es un CRJ regional. En SFO.
Este curioso paquidermo juraría haberlo visto expuesto en el Legends (no volaba). Sólo sé que es británico:
Este en cambio es alemán y no parece estar pasando un buen momento:
Había mucha humedad aquel día... Este chisme a medio camino entre un avión y un helicóptero, no tengo NPI de cómo se llama:
Un B-52 Stratofortress metiendo las uñas tras haber despegado.
Un Globemaster recién posado en pleno roll-out. El #3 no aguantó la reversión.
Esto es un camuflaje casi perfecto.
El giro tan animal ha provocado que la capa de aire encima del extradós se sature y la humedad se condense. Vosotros diréis qué juguetito se esconde bajo la nube. 
SOLUCIONAR PROBLEMAS DE HOTLINKING (Sólo con Firefox)
1.- Desinstalar el Internet Exploter o condenarlo al ostracismo.
2.- Bajar e instalar Firefox, por ejemplo desde aquí
3.- Abrir el firefox. Escribir en la barra de direcciones: about:config y abrir.
4.- En Filter escribir: header.
5.- Doble click en el campo: network.http.sendRefererHeader
6.- Cambiar cualquier valor presente por 0 (cero).
7.- Reiniciar firefox y disfrutar del hotlinking. Se acabaron las ranitas amarillas y los 747.
1.- Desinstalar el Internet Exploter o condenarlo al ostracismo.
2.- Bajar e instalar Firefox, por ejemplo desde aquí
3.- Abrir el firefox. Escribir en la barra de direcciones: about:config y abrir.
4.- En Filter escribir: header.
5.- Doble click en el campo: network.http.sendRefererHeader
6.- Cambiar cualquier valor presente por 0 (cero).
7.- Reiniciar firefox y disfrutar del hotlinking. Se acabaron las ranitas amarillas y los 747.